Me cuesta mantener los ojos abiertos. Tengo mucho sueño. Y es que Javier a las 4:00 estaba con pocas ganas de dormir. Me ha tenido hora y media en vela. Primero, acunándolo, luego el en su cuna y yo sentada en el suelo, y al final tumbados los dos en la cama de su habitación. Ha estado jugueteando con mis pendientes, y al final, se ha dormido. Yo me he ido a mi cama, y me ha costado un montón coger el sueño otra vez.
Y claro, cuando ha sonado el despertador para preparar a Javi para la guarde no lo he oído. Así que me he despertado un poco tarde, y hemos tenido que correr.
No se cómo se habrá ido vestido... espero haberle puesto los zapatos en el pie correcto.
Hoy toca café doble...
Buenos días.
