Tengo muchas cosas que hacer, y cero ganas. Mala combinación. Pero bueno, ahora me pongo al tema, que si no no me cunde y luego me enfado conmigo misma.
Toda la vida pensando que tenía ganas de ser mayor para dejar de dar explicaciones a todo el mundo, y ahora es peor: ahora tengo que dar más. O me da la sensación de que tengo que dar más, porque lo que está claro es que las doy porque quiero. Parece que necesite la aprobación de mi madre y de Dany para hacer según que cosas. No cambiaré nunca. Seré una vieja pelleja y seguiré necesitando la aprobación de alguien...
Ayer discutí con mi madre... otra vez. Me fui enfadadísima al ensayo. Menos mal que Mapi escuchó mi pataleta, y se me fue pasando.
Resumiendo, estoy hasta la polla de que me desautorice delante de Javi. Es como si diera a entender que yo no se. Y me revienta. Por ejemplo, ella le ofrece chucherías, yo le digo que no tiene que comer chucherías, porque al ser "mal comedor" si come chuches, las comidas principales las hace flojas. Y prefiero que se coma su comida o su cena a que se coma cuatro putos ganchitos. No es tan difícil, no? Pues mi madre sigue diciendo que le va a dar, y yo que no. Y ella que sí, y yo que no.... y termina convirtiéndose en una espiral de tira y afloja en la que lo menos importante es la razón por la que ha empezado. Termina siendo cuestión de orgullo, de quién puede más, de "por mis santos cojones se hace lo que digo". Menos mal que aquí el que más talento tiene es Javi... y cuando sacó mi madre las chuches no comió ni una sola. Pero es igual, yo estaba que me subía por las paredes...
Se que es una tontería, pero es que como esta son mil. Y me canso. No tengo que estar demostrando que se hacer bien las cosas. Me causa muchísima inseguridad. Si mi madre supiera cuánta, se cuidaría mucho de tocarme las pelotas así, y de otras mil maneras que no vienen al caso.
Al volver del ensayo, ya más tranquila, y mientras Dany le daba la cena al peque, hablé con mi madre y le dije que me cansaba, que me crea inseguridad, y que estoy hasta las pelotas (resumiendo, claro :P).
Me dijo que está orgullosa de mí, que hago muy bien todo lo que me pongo a hacer, que con Javier lo estamos haciendo muy bien, pero que no puede evitar tratarme como si fuera una cría. Que soy la pequeña, y siempre seré la cría. Que sabe que ya soy una mujer hecha y derecha, pero que se le olvida que debería tratarme como tal. Que se esforzará más, que lo intentará. Y yo me quedé más tranquila.
Quiero hacerme un piercing en el ombligo. A mi madre ni se lo diré hasta que no esté hecho, que no se cuándo será. Para qué? Para que me saque faltas? pues va a ser que no. Y Dany está sorprendido... Sí que choca, que siempre esté quejándome de mi gran pancha y ahora de repente me de por ponerme un adornico. Si ya lo se... pero cada día me disgusta menos, aunque siga siendo grande. Y me apetece, qué coño. No se cuándo será, pero el día menos pensado, me lo hago ^_^
