Os presento a mi primer bombón casero. A que es bonito? ^_^ Y esta riquísimo! tengo que perfeccionar el encamisado, que se nota un poco el chocolate negro, pero bueno, para ser el primer intento ha quedado muy majete, no? ;)
Me dejo de historias, y os pongo ya la receta:
Bombones blancos
rellenos de trufa negra y praline de almendras (15 u)
- 180 gr. de chocolate blanco Nestlé postres.
- 50 gr. de chocolate negro Nestlé postres.
- 50 ml. de nata.
- 30 gr. de praline de almendras (25 gr. de almendras crudas peladas y 25 gr. de azúcar)
Preparamos el praliné: Ponemos en la sartén ambos
ingredientes. Dejamos que el azúcar se caramelice e impregne las almendras.
Removemos de vez en cuando. Este proceso es muy rápido, no os paséis porque si
no podría quemarse y le daría ese sabor al praliné.
Volcamos la preparación sobre papel de horno y dejamos
que se enfríe y se endurezca.
Una vez frío, lo trituramos. En mi caso, Dany lo picó en el almirez. Si queréis, se puede pasar por la picadora para que quede finito.
Pasamos a "encamisar" los moldes. Derretimos el chocolate blanco troceado al baño maría. Volcamos el chocolate derretido sobre los moldes de
bombones y les damos unos golpes sobre la encimera para eliminar las posibles
burbujas que se hagan.
Ahora volcamos el molde sobre un papel de horno y dejamos que
escurra el chocolate dentro de él. Este chocolate lo reservaremos para sellar los bombones. Limpiamos lo que nos queda en el molde con una
espátula.
Reservamos el molde en la nevera para que el chocolate
se endurezca.
Nos ponemos ahora con el relleno:
Calentamos la nata, añadimos el chocolate cuando rompa
a hervir, dejamos reposar un minuto y removemos.
Añadimos el praline de almendras, mezclamos bien y
dejamos enfriar.
Para rellenar los moldes, ponemos el relleno dentro de
una bolsita o manga pastelera para que nos sea más sencillo. Rellenamos los
moldes sin llegar arriba del todo.
Metemos los moldes en la nevera hasta que se
solidifique el relleno. Podemos acelerar el proceso poniéndolos en el
congelador unos 10 minutos.
Cuando el relleno esté sólido, volvemos a derretir el
chocolate blanco al baño maría y cubrimos los moldes. Con una espátula arrastramos el
chocolate que nos sobra.
Los volvemos a meter en la nevera hasta que
solidifiquen.
Una vez que ya estén duros, los desmoldamos presionando
suavemente los moldes. Y a comer!!
